Juchitán de Zaragoza, Oaxaca.- La empresa Eléctrica del Valle de México, subsidiaria de la sociedad Eléctrica de Francia (EDF), reporta pérdidas millonarias incuantificables en el parque eólico “Bii Stinu”, por una protesta del Comité Regional de Propietario de Tierras que ha durado cuatro semanas. El Gerente Regional de Relaciones de la Empresa EDF, Rafael Cacho López, informó que están detenidos 19 aerogeneradores de las 124 turbinas instaladas en el parque eólico ante la falta de mantenimiento.
El conflicto entre la empresa Gamesa y los propietarios de tierras, provoca que estos últimos no permitan el ingreso del personal de la empresa eólica encargada del mantenimiento de las máquinas. La falta de operación de los 19 aerogeneradores ocasiona pérdidas millonarias para la empresa EDF, que opera el parque eólico “Bii Stinu”. El parque eólico que genera 164 Mega Watts de energía a través del viento, fue construido por Gamesa y esta misma empresa le da mantenimiento a los aerogeneradores.
El Comité Regional de Propietario de Tierras exige a la empresa Gamesa que se aclare que los integrantes de dicha organización “no son extorsionadores”, esto ante una demanda penal en su contra ante el Ministerio Público Federal. Los integrantes del Comité Regional de Propietarios de Tierras fueron acusados de extorsión durante una reunión el 22 de septiembre pasado, en perjuicio de la empresa Gamesa, cuando el Comité exigía un recurso económico para proyectos productivos.
Los propietarios de tierras en respuesta, tomaron dos parques eólicos: “Bii Hioxo” (Viento Fuerte) de Unión Fenosa y “Bii Stinu” (Nuestro Viento) de EDF, que fueron construidos por Gamesa y cuyos aerogeneradores se les da mantenimiento por personal de Gamesa. El parque eólico “Bii Stinu” se ubica entre los poblados de San Vicente y Santa Rita, a un costado de la carretera federal Transístmica que conduce a La Ventosa. Rafael Cacho aclaró que el problema es entre los propietarios y Gamesa, y que EDF solo se está viendo afectado por el conflicto.
Finalmente, hizo un llamado a la empresa Gamesa y los propietarios de tierras a sentarse a dialogar y solucionar el problema lo más pronto posible, para evitar más pérdidas en la operación del parque.
